acrílico agüachento, tintas recicladas, plumones, un cartón de caja de refrigerador, un pliego de papel bond del envoltorio de nosequecosa...En fin, todo sirvió para este cómic de una página (una gran página) un póster que fue pegado en la calle Zeggers con Baquedano, en la casa muerta (diría Porfelius).
Simplificar la idea, las termoeléctricas definitivamente ya no pasaran inadvertidas y estamos atent@s a lo que suceda, ya sabemos las estrategias de las autoridades y sobre todo ahora que las autoridades son l@s mism@s empresari@s, como es el caso de la ministra de medio ambiente, quien fue la directora de varios proyectos de termoelectricas, encargada de que estos pasaran el Sistema de Evaluación Ambiental , en su formato DIA o EIA. Como sea, la cosa se viene ruda!
El comic al servicio, como siempre en su buen arte de lucha social...
